La tempestad Xynthia, que barre el oeste de Europa desde la noche del sábado con un saldo de 52 muertos, dejó ayer Francia para desplazarse hacia Bélgica, Luxemburgo y Alemania, anunció el organismo meteorológico francés Meteo France.Francia ha tenido la peor parte con al menos 45 muertos, según el último balance provisional comunicado por el Ministerio del Interior.Gran parte de las víctimas en Francia se ahogó, mientras que otras murieron luego de ser golpeadas por trozos de edificios o por árboles y ramas derribados por el viento.Además, había al menos 12 desaparecidos y 59 heridos.
Casi 900.000 personas quedaron sin electricidad. Los ríos se desbordaron en la región de Bretaña y la amenaza de avalanchas era alta en los Pirineos y el sur de los Alpes debido a la nieve húmeda y el viento.
En España, el ministro del Interior, Alfredo Pérez Rubalcaba, dijo que tres personas murieron durante el temporal que azotó las regiones del norte: una mujer en Orense, y otras dos cuyo vehículo fue aplastado por un árbol en Arlanzón, al norte de Madrid. Los vientos de 190 kilómetros por hora en la islas Canarias durante la noche provocaron que una grúa se derrumbara y cayera sobre un edificio. Varias farolas también destrozaron vehículos aparcados y hubo muchas cancelaciones de vuelos.
En Alemania, un hombre murió y su esposa resultó herida al caer un árbol sobre su automóvil en la Selva Negra, y una mujer que hacía jogging murió al caer un árbol en Bergheim.Bélgica lamentó ayer su primera víctima: un hombre muerto por el desplome de un árbol en su jardín en Jodoigne, cerca de Bruselas.