EFE.- El observatorio solar STEREO ha detectado una erupción solar que viaja hacia la Tierra a 600 kilómetros por hora, que puede causar una tormenta geomagnética, informó hoy la NASA.
El Observatorio de Relaciones Terrestres (STEREO), que la NASA envió en 2006 para estudiar cómo afecta el flujo de energía y la materia solar a la Tierra, y el Observatorio Heliosférico y Solar (SOHO) detectaron la erupción el día 23 de enero.
Este fenómeno puede enviar partículas solares y alcanzar la Tierra hasta tres días después provocando una "tormenta geomagnética" que puede afectar a las redes eléctricas y los sistemas de telecomunicaciones.
La NASA explicó que en el pasado otras eyecciones solares con esta velocidad no han causado tormentas geomagnéticas "sustanciales", aunque sí han dejado su huella con auroras visibles en los polos.
En esta ocasión, según la NASA, parece "poco probable" que la tormenta afecte a los sistemas eléctricos en la Tierra o cause interferencias en los GPS o en los satélites de comunicaciones.
No obstante, recomienda estar pendiente de la información del centro de meteorología espacial de la Administración Nacional de Océanos y Atmósfera (NOAA) de EE.UU.
El telescopio de la NASA High Resolution Coronal Imager (Hi-C), lanzado en un cohete suborbital en 2012 para estudiar la corona del Sol, su parte más caliente, acaba de descubrir cómo el Sol acumula y libera energía.
El telescopio fue capaz de captar filos de plasma magnéticos en las capas exteriores del Sol, que supone la primera evidencia clara de la transferencia de energía del campo magnético del Sol a su corona, algo que hasta ahora era sólo teoría.
Estas observaciones ayudarán a los científicos a elaborar mejores predicciones del clima espacial, ya que la evolución del campo magnético en la atmósfera solar impulsa todas las erupciones solares, que pueden llegar a la atmósfera y causar estas tormentas.
El Observatorio de Relaciones Terrestres (STEREO), que la NASA envió en 2006 para estudiar cómo afecta el flujo de energía y la materia solar a la Tierra, y el Observatorio Heliosférico y Solar (SOHO) detectaron la erupción el día 23 de enero.
Este fenómeno puede enviar partículas solares y alcanzar la Tierra hasta tres días después provocando una "tormenta geomagnética" que puede afectar a las redes eléctricas y los sistemas de telecomunicaciones.
La NASA explicó que en el pasado otras eyecciones solares con esta velocidad no han causado tormentas geomagnéticas "sustanciales", aunque sí han dejado su huella con auroras visibles en los polos.
En esta ocasión, según la NASA, parece "poco probable" que la tormenta afecte a los sistemas eléctricos en la Tierra o cause interferencias en los GPS o en los satélites de comunicaciones.
No obstante, recomienda estar pendiente de la información del centro de meteorología espacial de la Administración Nacional de Océanos y Atmósfera (NOAA) de EE.UU.
El telescopio de la NASA High Resolution Coronal Imager (Hi-C), lanzado en un cohete suborbital en 2012 para estudiar la corona del Sol, su parte más caliente, acaba de descubrir cómo el Sol acumula y libera energía.
El telescopio fue capaz de captar filos de plasma magnéticos en las capas exteriores del Sol, que supone la primera evidencia clara de la transferencia de energía del campo magnético del Sol a su corona, algo que hasta ahora era sólo teoría.
Estas observaciones ayudarán a los científicos a elaborar mejores predicciones del clima espacial, ya que la evolución del campo magnético en la atmósfera solar impulsa todas las erupciones solares, que pueden llegar a la atmósfera y causar estas tormentas.