Miles de personas huyeron este fin de semana de los incendios forestales que asolan desde el viernes el sureste de la isla de Tasmania, en el sur de Australia, indicó este sábado la Policía.
El sinistro, que ha destruido al menos 80 edificios, ha causado la muerte de una persona, dijo la fuerza del orden.
Los incendios estallaron el viernes, en momentos en los que el país
sufre una ola de calor con temperaturas que han llegado a más de 40
grados centígrados en Tasmania, una región conocida por su clima más
fresco que el resto del país.
Devastación. Uno de los lugares más afectados por los incendios fue la
localidad de Dunalley, a 55 kilómetros al este de Hobart (sureste),
donde la Policía calculó que un 30% de los edificios fueron destruidos
por las llamas, incluyendo la comisaría y la escuela.
En Connelly’s Marsh alrededor de un 40% de las edificaciones fueron
devastadas por el fuego. Según fuentes policiales, los bomberos que
intentaban sofocar las llamas fueron atrapados el viernes por un
incendio forestal en Dunalley, donde se teme que un hombre haya muerto.
Los bomberos “tuvieron que refugiarse en su vehículo cuando estalló el
incendio y vieron, si he entendido bien, a un hombre que intentaba
proteger su casa, pero no pudieron socorrerlo, la situación era
demasiado peligrosa”, explicó el comisario Scott Tilyard a la AFP. Unas
2.000 personas se refugiaron en la ciudad de Nubeena, mientras que otras
700 lo hicieron en el sitio histórico de Port Arthur. Otras fueron
acogidas en un alojamiento de emergencia en Hobart.
En 2009, 173 personas fallecieron, pueblos enteros quedaron arrasados y
al menos medio millón de hectáreas de terreno fueron calcinadas en el
estado australiano de Victoria.