Fuertes lluvias e inundaciones provocaron la muerte de dos personas, la desaparición de otras dos, y 200.000 afectados en ocho municipios del estado brasileño de Rio de Janeiro, al tiempo que los partes meteorológicos anunciaban más precipitaciones, informó el viernes la Defensa Civil.
El viernes, dos personas, entre éstas un niño de nueve años, fueron reportadas desaparecidas. El jueves habían sido reportados ocho desaparecidos, pero cinco personas de una familia, que habían salido de la casa en zona de riesgo al inicio de la tormenta, fueron localizadas sin daños, mientras que una sexta persona habría sido localizada.
Uno de los fallecidos, no identificado, fue arrastrado por una tromba
de agua en el municipio de Xerem, el más afectado, en la zona norte del
estado de Rio de Janeiro, donde cuatro ríos se desbordaron y un puente
fue destruido.
El viernes, un hombre de 49 años, Roberto Maggesi de Souza, murió
víctima de la caída de un árbol en el bosque de Tijuca, en Rio.
El secretario de Defensa Civil de Rio, Sergio Simoes, previno el
viernes contra eventuales deslizamientos de tierra en la región
montañosa ubicada a 80 km de Rio, donde se esperan más lluvias.
Bomberos acuden para atender las emergencias
El responsable dijo que 2.075 personas en zonas de riesgo fueron
llevadas a instalaciones municipales, escuelas e iglesias, y que otras
438 perdieron sus casas.
"Hay que reducir las zonas vulnerables, es el papel de los
ayuntamientos. Las personas construyen sus casas demasiado cerca de los
ríos o en vertientes de montaña", lamentó.
El ministro de Integración Nacional, Fernando Bezerra, viajó a Rio,
donde se reunió con el gobernador, Sergio Cabral, para abordar las
medidas a tomar y visitar áreas afectadas.
En Xerem, sólo el jueves cayeron 212 milímetros de agua por metro
cuadrado en 24 horas, más de la mitad de lo que llueve en un mes, según
los servicios meteorológicos.
En las últimas dos semanas, Rio había registrado las temperaturas más altas desde 1915, de más de 40 grados centígrados.
En los municipios de Angra dos Reis, que tiene una central nuclear,
Paraty o Mangaratiba, las lluvias continuaron durante la noche.
Ya habían llegado refuerzos para los bomberos a las regiones montañosas
de Petrópolis, Teresópolis y Nova Friburgo (a unos 80 kilómetros de
Rio).
En enero de 2010, diez días de lluvias torrenciales se saldaron con 900
muertos y 400.000 damnificados en esta región montañosa.