GIJÓN -ESPAÑA
La undécima jornada de búsqueda del niño desaparecido el 29 de diciembre en un accidente náutico en la bocana del Puerto Deportivo se cerró ayer con un nuevo rescate, el de dos guardias civiles que participaban en el dispositivo y que volcaron con su lancha cuando se encontraban navegando por la parte exterior del dique Lequerica.
El accidente tuvo lugar pasadas las seis de la tarde, cuando ya estaba anocheciendo. Los agentes del Servicio Marítimo de la Guardia Civil regresaban en una lancha semirrígida al puerto tras dedicar la tarde a peinar las proximidades de la costa gijonesa en busca del menor desaparecido, una labor en la que en ese momento también estaba participando el Helimer, el helicóptero de Salvamento Marítimo. Según informaron fuentes de la Comandancia de Gijón, en un momento dado uno de los guardias civiles se precipitó al agua accidentalmente, lo que activó un dispositivo automático de seguridad denominado 'hombre al agua', por el que se para de modo instantáneo el motor de la embarcación para evitar que las hélices dañen al náufrago.
Sin el empuje del fueraborda, y pese a intentar ayudarse con un remo, el guardia civil que quedó a bordo fue incapaz de controlar la lancha, que se encontraba en una zona donde en ese momento había un fuerte oleaje. Al final perdió su lucha contra la fuerza del mar y la embarcación acabó volcando. Los agentes, no obstante, pudieron mantenerse a flote gracias a los chalecos salvavidas, cuyos dispositivos luminosos sirvieron además para localizar su posición.
Izados desde el helicóptero
De forma inmediata, el Helimer se desplazó al lugar donde se encontraban los agentes para proceder a su rescate, ante la mirada de decenas de curiosos que en ese momento paseaban por el dique. «Estaban buscando por aquí por donde las rocas y estaba el helicóptero enfrente, enchufando para donde estaban ellos y fue cuando vi que la lancha volcaba», explicaba un testigo. Otros se lamentaban de la mala suerte de quienes «estaban trabajando para encontrar al pobre neñu y casi queden ahí». Los rescatadores de Salvamento Marítimo, sin embargo, no tuvieron mayores problemas para sacar por el aire a los dos agentes, con una espectacular maniobra desde el helicóptero. Inmediatamente fueron trasladados al Hospital de Jove para evaluar su estado de salud. Fuentes de la Guardia Civil señalaron que los dos rescatados presentaban una hipotermia leve. En las labores de rescate también participó la Salvamar Rigel.
La ubicación de la embarcación accidentada, en plena escollera del rompeolas, el fuerte oleaje y la falta de luz, dado que ya había anochecido, motivaron la renuncia a recuperar la lancha, por el riesgo que suponía. Desde el rompeolas se adueñó del ambiente un fuerte olor al combustible perdido por la lancha.
El accidente tuvo lugar un día después de que el Servicio Marítimo de la Guardia Civil, unidad a la que estaban adscritos los dos accidentados, celebrara sus diez años de presencia en el Principado. En el acto el teniente coronel Juan Bautista Martínez Raposo, destacó cómo en labores como la búsqueda del niño desaparecido la gente puede ver el importante trabajo de la Guardia Civil.