jueves, 10 de junio de 2010

LA COSTA DE LUGO SE PREPARA PARA OTRA NOCHE EN VELA POR INUNDACIONES


El temporal de lluvia que desde las 22:00 horas de ayer afecta a la costa de Lugo no da tregua y en esta comarca se preparan para pasar otra noche en vela, luego de haberse registrado precipitaciones de hasta 150 litros por metro cuadrado en algún municipio como fue el caso de Burela, el más afectado por la virulencia de este temporal.

Las consecuencias de la lluvia acumulada se resumen en que casi mil alumnos no pudieron acudir a clase, la línea de FEVE no funcionó en varios puntos, por 12 carreteras provinciales no se puede transitar, también quedó cortada una carretera nacional en Viveiro y en Ribadeo fue necesario evacuar, por precaución, a 3 mujeres.

A última hora de la tarde estaba previsto dar por concluidos los trabajos en FEVE, ante la persistencia del temporal y la imposibilidad de recuperar el servicio.
Según informaron fuentes de Fomento, mañana se tratará de restablecer esta actividad ferroviaria en aquellos puntos donde hubo de ser suspendida por derrumbes o socavones, por lo que se tuvo que facilitar transporte alternativo a los usuarios.

La lluvia se acumuló con tanta virulencia en Burela que dejó la villa dividida en dos cuando la arteria principal se convirtió en una riada y las inundaciones en bajos, establecimientos comerciales y casas alcanzaron hasta los dos metros de altura, tanto en esta localidad como en núcleos de Barreiros, Cervo o Ribadeo.
La gravedad de la situación llevó al alcalde de Burela, Alfredo Llano, a decretar el cierre de los 4 colegios de este municipio, en los que tampoco habrá actividad lectiva mañana viernes.

En este mismo municipio fue necesario rescatar al conductor de un vehículo que quedó atrapado en una bolsa de agua, en tanto que en Ribadeo continuaron por la tarde las complicaciones, hasta el punto de que la Policía Local tuvo que regular el tráfico en la nacional 634, puesto que el agua impedía circular con normalidad.

El alcalde de este municipio, Fernando Suárez, describió la situación como "lamentable y preocupante", a la vez que alertó de que la construcción de la A-8 ha contribuido a incrementar los problemas, ya que, explicó, se hicieron confluir varios riachuelos en unos pocos, que "no dan abasto" para trasladar tanta agua.

Los sótanos, plantas bajas de viviendas y establecimientos comerciales inundados fueron una constante por toda la geografía mariñana, desde donde desbordaron de llamadas el servicio de emergencias 112.
Hasta la costa se desplazó el conselleiro de Presidencia, Alfonso Rueda, para comprobar in situ los efectos del temporal y anunciar que continúa activado el dispositivo que la Agencia Gallega de Emergencias centralizó en Barreiros.

La Diputación, cuyo máximo responsable, José Ramón Gómez Besteiro también pasó el día en A Mariña, concentró todos sus medios materiales en esta zona, donde mantiene activos 40 operarios y 20 vehículos para atender las incidencias del temporal.
39 REVI 002