El huracán Tomás se debilitó ligeramente ayer luego de arrancar techos y derribar tendidos eléctricos en el oriente del Caribe, pero los meteorólogos dijeron que el meteoro podría recuperar fuerza y enfilarse hacia Haití, donde 1,3 millones de personas viven en refugios vulnerables.
El huracán con vientos sostenidos máximos de 150 kph (90 mph) avanzaba con dirección oeste-noroeste y podría llegar a Haití en los próximos días. El Centro Nacional de Huracanes, con sede en Miami, pronosticó que el meteoro se debilitará un poco más antes de retomar fuerza antes del martes. Daniel Brown, meteorólogo del Centro, dijo que Tomás “probablemente se fortalezca cuando esté sobre el Caribe central” y que Haití y República Dominicana podrían comenzar a recibir lluvias de las bandas externas de la tormenta en unos cuantos días. Algunos temen lo peor si Tomás golpea a Haití, donde cientos de miles de personas tiene sólo refugios rudimentarios casi 10 meses después del terremoto del 12 de enero y un brote de cólera ha matado a más de 330 personas y mandado al hospital a 5.000 más. “Es muy complejo y muy grave”, dijo Imogen Wall, de la Oficina de Coordinación de Asuntos Humanitarios de la ONU.