Al menos 44 personas han muerto en China y otras ocho continúan desaparecidas por los deslizamientos de tierra producidos en la región autónoma de Guangxi (sur) a consecuencia de las intensas lluvias registradas en los últimos días, según el último balance dado a conocer este jueves por las autoridades.
Los corrimientos de tierra han afectado especialmente a dos zonas de la región. Se trata del condado de Rongxian, donde han muerto 27 personas, y el de Cenxi, donde la cifra de fallecidas es de doce personas, según informó el Gobierno regional en un comunicado recogido por la agencia estatal Xinhua.
Hay 27 condados afectados por las lluvias y los desplazamientos de tierra en toda la región, que han obligado a evacuar a más de 140.000 personas, según los servicios de rescate. Además, más de 8.000 viviendas han quedado destruidas, más de 160.000 hectáreas de cultivo han sufrido daños y las pérdidas totales se estiman en 1,2 billones de yuanes (unos 144 millones de euros).
Por otro lado, según un portavoz del ayuntamiento de la localidad de Laibin, situada en el corazón de la zona afectada, los corrimientos se podrían haber producido a consecuencia de las crecidas de los ríos subterráneos originados por las intensas lluvias, que comenzaron el pasado miércoles.
Estos deslizamientos, unidos a las inundaciones, han obligado a suspender las clases en la localidad de Laibin, donde además fueron halladas ahogadas dos hermanas de ocho y diez años de edad. En esta localidad han sido evacuadas más de 600 personas, y se han formado socavones que han llegado a alcanzar dimensiones de 70 metros de diámetro y 20 de profundidad.
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